Seleccione idioma

Spanish

Down Icon

Seleccione país

France

Down Icon

Hasan Hadi, cineasta: «Mi película demuestra que es posible filmar en Irak»

Hasan Hadi, cineasta: «Mi película demuestra que es posible filmar en Irak»

Proyectada en la Quincena de Realizadores, “La tarta del presidente” es la primera película iraquí que compite en la Croisette. Su director, Hasan Hadi, insistió en rodar esta fábula sobre la vida cotidiana bajo el régimen de Saddam Hussein en su país natal. Nos explica por qué.

El cineasta iraquí Hasan Hadi. Foto en tándem

“Un empate peligroso, un gallo como confidente y unos niños lanzados a una búsqueda imposible: si los ingredientes de esta película vienen de un cuento de hadas, su receta incorpora toda la amargura que impregnaba la vida cotidiana de los iraquíes bajo Saddam Hussein”, comenta Screen, una revista británica especializada en noticias de cine. Proyectada en la Quincena de Realizadores, The President's Cake debería "atraer a un público amplio", añade la revista británica especializada en noticias de cine.

El largometraje del iraquí Hasan Hadi nos traslada a 1990, a un país debilitado por la guerra contra Irán (1980-1988) y el embargo económico impuesto por Estados Unidos tras el intento de invasión de Kuwait (verano de 1990). Su trama está inspirada en hechos reales. Como una cuestión de culto, el cumpleaños de Saddam Hussein (en el poder entre 1979 y 2003) se celebró incluso en las escuelas. Cada año, los estudiantes eran seleccionados al azar. Uno debía llevar flores, otro fruta y otro un pastel... Lo que, en estos tiempos de privaciones y escasez, podía ser una aventura loca. El fracaso era arriesgado, podías ser sospechoso de pertenecer a una familia de opositores.

En la pantalla, es Lamia (Baneen Ahmad Nayyef), un árabe de las marismas, a quien se le confía la misión de hacer un pastel. Entonces se dirige a Bagdad, a siete horas de viaje, con su abuela Bibi (Waheed Thabet Khreibat) y su gallo Hindi, para intentar encontrar huevos, harina y azúcar. «Numerosas aventuras se suceden en una ciudad atravesada por procesiones dedicadas al culto del presidente, cuyo retrato se expone en cada esquina, en cada tienda», explica el diario argelino L'Expression .

La tarta del presidente es la primera película iraquí seleccionada para el Festival de Cine de Cannes. También es el primer largometraje de Hasan Hadi. Nacido en el sur de Irak, donde creció, estudió cine en la Universidad de Nueva York antes de regresar a establecerse en Bagdad. De paso por la Croisette para presentar su película, respondió a las preguntas de Courrier International.

COURRIER INTERNATIONAL Su película ofrece una oportunidad única de descubrir en la gran pantalla las marismas de Mesopotamia, en la desembocadura de los ríos Tigris y Éufrates. ¿Qué representa esta región para usted?

HASAN HADI Esta zona del sur de Irak me ofreció el escenario perfecto. Para empezar, fue la cuna de la civilización mesopotámica, considerada la civilización más antigua. También fue la cuna de la Epopeya de Gilgamesh [una de las obras literarias más antiguas de la humanidad, que presenta las aventuras épicas del rey del mismo nombre]. Las marismas son a la vez realidad y fábula, y quería que ambos elementos impregnaran mi película.

En segundo lugar, esta región simboliza una parte importante de la identidad iraquí, más aún bajo el régimen de Saddam Hussein. En 1991, después de un intento de insurrección que comenzó en estos pantanos, Saddam decidió

Courrier International

Courrier International

Noticias similares

Todas las noticias
Animated ArrowAnimated ArrowAnimated Arrow