El odio que alimenta a Chega

El partido Chega colocó carteles con la frase "Esto no es Bangladesh".

Para aquellos que prestan un mínimo de atención al mundo que les rodea, resulta evidente que esta frase surge como respuesta a una canción generada por IA que se hizo viral sobre André Ventura.

Aprovechando la ola, Chega hizo lo que mejor sabe hacer: crear un tsunami. Si hay algo en lo que este partido sobresale, es en saber aprovechar las oportunidades para que sus oponentes le brinden publicidad gratuita las 24 horas del día, los 7 días de la semana. En esto, Chega es verdaderamente brillante. Utiliza magistralmente a quienes creen sinceramente estar atacando al partido para promover su imagen. Stalin tenía un nombre para este tipo de persona.

Obsérvese que a menudo se dice, y con convicción, que el partido Chega alimenta el odio en la sociedad, que promueve el odio, el discurso de odio…

Tiendo a estar de acuerdo, pero quizá no por las mismas razones que llevan a la inmensa mayoría de los expertos en todo, incluidos los medios de comunicación, a afirmarlo. Chega tiene una relación especial con el odio, porque logra canalizar ese sentimiento para promocionarse en los medios a diario y a bajo costo.

Pero este odio, al contrario de lo que algunos quieren hacer creer, no es de Chega hacia los demás, sino de los demás hacia Chega. Y lo peor que podría pasarle al partido liderado por André Ventura es que sus oponentes se den cuenta de esto y empiecen a actuar en consecuencia.

Chega no es de extrema derecha, fascista, racista ni nada de lo que la izquierda lleva décadas etiquetando a cualquiera a la derecha de Marx. Pero a Chega le conviene seguir el camino que fomenta esas etiquetas porque, en medio de la confusión, alimenta el odio de quienes se oponen a ella.

Este odio, que la inmensa mayoría de periodistas, comentaristas y "redactores" sienten hacia el partido Chega y su líder André Ventura, es tan fuerte que ya ni siquiera se molestan en fingir que no lo sienten.

Y constantemente vemos a André Ventura, Chega o alguien/algo relacionado con ellos siendo tendencia en X, en las noticias, en horas y horas de comentarios políticos, informes e incluso libros que promocionan al partido, incluso cuando el objetivo es el opuesto.

Por supuesto, en medio de todo esto, hay varias personas que, de forma inteligente, entendieron lo que sucedía y se aprovecharon de la situación para sacar provecho, adoptando una postura de ataque constante contra el partido Chega y todo lo relacionado con él. Y, si no lo dicen directamente, encuentran la manera de decirlo.

Existen varios casos de completos desconocidos que, al someterse a esta estrategia, se convierten en comentaristas políticos de forma permanente. Estas personas deberían agradecer a André Ventura por rescatarlas del anonimato al que estaban destinadas, y al que volverán cuando cambien las circunstancias.

¿Acaso sugiero que la oposición deje de hablar de Chega? Me da igual. Desde luego, no me corresponde a mí decirle a la izquierda cómo debe actuar.

Pero aun así, les dejo con esta reflexión: si necesitas inventar cosas para atacar a alguien, es porque no puedes hacerlo por la verdad.

Dicen que a buen entendedor, pocas palabras; y por si acaso, les dejo con una palabra y media.

En cuanto al embajador de Bangladesh, que solicita explicaciones sobre el cartel en cuestión, le pido que lea esto detenidamente y reflexione sobre la siguiente pregunta: ¿Es Portugal Bangladesh?

De nada.